Por Sergio Grosjean
Inaugurado el 24 de enero de 1926 , el monumento a Felipe Carrillo puerto surge de una convocatoria realizada por el ayuntamiento de Mérida dos años antes, en la que invitaba a artistas ya sea nacionales o extranjeros que vivieran en el país a realizar un diseño para consolidar el mejor proyecto en honor a este destacado político.
Cabe mencionar que originalmente estaba proyectado para instaurarlo en la glorieta que conforma el cruce de la avenida de Itzáez y la av. Colón.
Se premiaría a los tres mejores proyectos pero el primero sería el que se construiría, siendo así que finalmente en 1925 se publica el resultado de los 3 proyectos ganadores: 1) arqueólogo Miguel Angel Fernández, 2) Escultor Miguel Centurión y 3) el equipo formado por Leopoldo Tommasi, su hermano Alfonso Tommasi y el italiano Ángel Bachini. Sin embargo, por cuestión de desavenencias entre el ayuntamiento de Mérida y el gobierno del estado no se construye.
Ya en 1926 se inaugura en el lugar donde el antiguo gobernador Carlos Castro Morales había puesto la primera piedra para construir el monumento a Nachi Cocom en 1918.
Curiosamente el obelisco se construyó con piedra traída de Sotuta y al final el proyecto que se desarrolló fue el de Leopodo Tommasi y no el del ganador de la convocatoria.
En el presente, gracias a la apatía, negligencia o falta de voluntad política, el monumento sigue pintarrajeado, siendo que me resulta increíble, que después de tantos meses y tanto anuncio, el alcalde y sus secuaces no hayan podido ponerse de acuerdo con el INAH para limpiarlo de una vez por todas.
Al día de hoy, no se puede observar con claridad ni las placas que hay una por lado, ni las frases, tampoco las imágenes y esculturas, y menos la figura del martir Felipe Carrillo Puerto.
A lo mejor están esperando la próxima pinta para evitar la fatiga. Ahhh… pero si hubo mucho dinero para los nefastos panfletos que tiraron a manos llenas durante el estéril y ridículo informe del alcalde.
Uff.. Pobre nuestro Paseo de Montejo, este par de caricaturas que tenemos dirigiendo a Mérida y Yucatán se han esmerado a convertir esta emblemática vía en una caricatura de mal gusto.
Feliz miércoles
